Hortensia
Papadat-Bengescu
Gadir. Madrid (2010) 277
págs.T.o: Concert din muzica de Bach. Traducción: Joaquín
Garrigós
Hortensia Papadat-Bengescu (Ivesti 1876-Bucarest 1955) es considerada, por muchos, como la autora que conduce la novela rumana a
niveles europeos desde una narrativa estrictamente nacional en la que discurría
hasta esos momentos. La influencia de Proust y de Virginia Wolf es evidente
para los críticos.
Nace en una familia burguesa y culta y recibe una buena formación literaria
y musical. Casada con un magistrado y madre de cuatro hijos, tiene que
trasladarse de una ciudad provinciana a otra sin poder centrarse literariamente y sin acabar de ser
comprendida por su marido. Al
llegar, definitivamente, a Bucarest se une al círculo literario de Eugen
Lovinescu y comienza su carrera literaria propiamente dicha en 1919.
Concierto de música de Bach forma parte de un ciclo de novelas centrada en
el tema de la familia, es,
sin lugar a dudas, una gran novela, calificada por muchos como obra maestra.
El lenguaje es culto, pero
asequible y la traducción buena en su conjunto, aunque haya momentos más
incompresibles, favorece la lectura.
Trascurre la novela en el periodo entre guerras y en la sociedad noble y
burguesa de esos momentos, refinada, culta y afrancesada. A través de una serie
de capítulos entrelazados van apareciendo los personajes que poco a poco, van
convergiendo hacia el acontecimiento de la preparación y ejecución de un gran
concierto de Bach. Aunque el concierto no se llega a dar, la novela en sí, es
un gran concierto con una apoteosis en el momento del ensayo general, cuando
Elena –la anfitriona que reúne a todos los personajes- describe sus
sentimientos y la realidad a través de la música que se está interpretando. Un
segundo momento majestuoso se vuelve a dar cuando la Coral espontáneamente
comienza a cantar. Estos dos pasajes al final de la novela tienen una gran
fuerza lírica y son arrolladores.
Todo el relato discurre a través de la narración de los hechos y del mundo
interior de las mujeres; con una introspección dura y ácida se va descubriendo
que todos los personajes tienen en su pasado alguna falta, algún error que de
alguna manera los está persiguiendo y condicionando; el lector lo va
descubriendo poco a poco y de esa manera va entendiendo a cada uno de ellos, a
caballo entre el presente y el pasado.
Lo sorprendente de la narración es que da la sensación de que no ocurre
nada, de que más que acción estamos parados, quietos, observando la inacción,
cuando realmente van ocurriendo pequeñas cosas que determinan cambios profundos
en los personajes y en sus vidas.
Se va mostrando una sociedad cínica, perversa, vanidosa, frívola, en las
que las mujeres son las mueven todo y los hombres están bajo su dirección. Hay,
sin embargo, un hombre –Lica- que es como el eje de todos los personajes y todo
acaba convergiendo en él. Curiosamente se apoda “el trovador”, como para no
desentonar con el fondo musical de todo el relato. Los tipos humanos son
variados, característicos, complejos, pero no complicados, tienen defectos y
quizá hay uno que sobresale pero no acaban de ser personajes anormales o
patológicos. Frente a la impureza y maldad de ellos se levanta la música limpia
y perfecta de Bach.
Hortensia Papadat-Bengescu
(1876-1955) está considerada como la autora que conduce a la novela rumana, en
la primera mitad del siglo XX, al mejor nivel europeo. Nace en una familia
burguesa y culta y recibe una esmerada formación literaria y musical. Casada
con un magistrado y madre de cuatro hijos, tiene que trasladarse de una ciudad
a otra sin poder dedicarse con intensidad a la literatura y sin acabar de ser
comprendida por su marido. Cuando se instala definitivamente en Bucarest en
1919, se une al círculo literario de Eugen Lovinescu y comienza su carrera
literaria propiamente dicha.
Concierto de música de Bach forma
parte de un ciclo de novelas centrada en el tema de la familia. Trascurre la
novela en el periodo entre guerras y está ambientada en la sociedad noble y
burguesa, refinada, culta y afrancesada de aquellos años. A través de una serie
de capítulos entrelazados aparecen los personajes que poco a poco convergen
hacia el principal acontecimiento de esta novela: la preparación y ejecución de
un gran concierto de Bach.
La autora parte de la descripción de los menudos hechos, los preparativos
del concierto, para llegar a lo que le interesa de verdad: mostrar el mundo
interior de las mujeres que se reúnen alrededor de Elena, la anfitriona. Con
una introspección dura y a ratos ácida, la autora desvela cómo todos los
personajes tienen en su pasado alguna falta, algún error que de alguna manera
los sigue persiguiendo. Lo sorprendente de la narración es que da la sensación
de que no sucede nada, de que más que acción estamos quietos, observando la
inacción de los personajes, cuando realmente ocurren pequeñas cosas que
determinarán cambios profundos en estas mujeres y en sus vidas.
Con este fresco aparentemente intrascendente, Papadat-Bengescu, manejando
un lenguaje culto pero asequible para todo tipo de lectores, muestra el lado
sombrío de una sociedad cínica, vanidosa, frívola, en la que las mujeres son
las que mueven todo, sin que los hombres tengan mucho que decir. Hay, sin embargo, un hombre, Lica, a quien
llaman El Trovador, que funciona como el eje del resto de los personajes.
Y frente a este superficial y mezquino mundo que la autora describe con
maestría se levanta la música limpia y perfecta de Bach, también protagonista
de esta novela. Hay dos excelentes momentos en los que la música y la poesía lo
llenan todo: durante el ensayo general y cuando de manera espontánea la Coral
comienza a cantar.
Sin lugar a dudas, Concierto de música de Bach es una gran novela
que describe con acierto las sombras de una clase social que, en el periodo de
entreguerras, vivía su momento de esplendor.